SUECIA, LA NACIÓN DONDE PERDER ES GANAR

 En el post de hoy, veremos cómo a pesar de las dificultades que la vida presenta, hay un pequeño lugar en el mundo donde siempre existen las segundas oportunidades,... Es así que hablaremos de Suecia.

Perder un trabajo, es inevitablemente algo inesperado y un punto a priori muy negativo en la vida de cualquier persona, más todavía si ocurre en medio de una enorme crisis económica.

Aunque de primeras sea claramente algo muy indeseado para alguien, en Suecia es realmente lo mejor que te puede pasar. Gracias a un servicio especializado de asistencia social privado a nivel nacional para aquellos trabajadores que han sido despedidos, los desempleados consiguen rápidamente encontrar un empleo, y no solo eso, sino además es frecuente que consigan un empleo mejor con más retribución.

En otras palabras, consiste en un sistema diseñado para que logres un trabajo mejor, para construir desde cero y finalmente avances en tu carrera profesional.

De ahí, no es de extrañar que esté denominado “sistema de transición” que mejora las habilidades del trabajador para el futuro pero cercano regreso al mundo laboral, haya contribuido a que la tasa de reempleo de Suecia se encuentre en una de las mejores del mundo. Concretamente, aproximadamente el 90% de los trabajadores despedidos vuelven al mercado laboral en menos de un año. 

En total existen unas 16 organizaciones, cada una de las cuales cubre un sector diferente de la economía y tienen la tarea de encontrar nuevos empleos para aquellos que han perdido el suyo.


Exactamente, estos consejos ofrecen ayuda durante cinco años a partir de la fecha en la que la persona perdió el empleo, para que las personas continúen recibiendo apoyo si un nuevo trabajo no funciona.
Por otra parte, Suecia ofrece centros de trabajo administrados por el estado, que se esfuerzan por relacionar a las personas desempleadas con las vacantes de empleo. Además, el servicio público está dominado por los desempleados de larga duración o por personas que intentan encontrar sus primeros empleos, como jóvenes sin educación secundaria o inmigrantes recién llegados.

De este post concluimos, no solo que en Suecia perder un empleo es casi mejor que permanecer en él; además de que cuenta con un sistema envidiable debido a su eficiencia e implicación permanente, sino también a no rendirnos fácilmente ya que la vida siempre acaba sorprendiendo y brindando una nueva oportunidad. 

Por último, mencionar que el equivalente más próximo a Suecia en este aspecto es el Transfermaßnahmen de Alemania, o "medidas de transferencia", donde el apoyo para los trabajadores desempleados despedidos se financia en parte por la empresa y en parte por el estado. Sin embargo, estos dos casos son una excepción, ya que en la mayoría de los países, no existe apoyo adicional para los trabajadores despedidos, aparte de los planes estatales. Esto se aplica al sistema francés,  Bélgica y los Países Bajos, por ejemplo, aunque en muchos otros lugares de Europa ya se están persiguiendo sistemas similares al sueco.

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